Dile que he dejado a sus palabras
hilando entresijos de mentiras,
que se ha vuelto piedra callada,
última noche a solas.
Dile que hay olvido consumado,
ignorancia sólida de cuerpo transparente,
que a su través se muestra
el aire de urgencia de otros caminos.
Dile que he puesto sordera
en los resquicios por los que aún
inocula abismos,
en los que mi dolor,
como un animal enfermo,
por fin se autoaniquila.
Lo gritaré para que llegue a sus oídos, escuchará. Verás.
ResponderEliminarUn besazo. Feliz verano.