sábado, diciembre 16, 2006

Credo-2

Creo en la caída que quiero sobre tus manos,
en hacerme polvo a la deriva de tus dedos,
en ser tacto infinito y maleable.

Creo en la sustancia que hierve en tu costado,
en tu oscuro sabor a lecho mojado,
en la exhalación lunar de tus mareas.

Creo en la ternura que me habita,
en la que diluye tu alma por mi cuerpo
y abre la carne que cerré en falso.

Creo en lo que arde bajo tus párpados,
en las papilas robadas de tu lengua,
en la impaciencia volcada por tus ingles,
en la inclinación abismal de mi deseo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario